Pero en realidad no les hace falta a los señores del PP ni a sus “tropas auxiliares” de la AVT o el Foro de Ermua ver ninguna película. Basta con que Julio Medem haya denunciado la campaña electoral del PP en las últimas elecciones vascas como ejemplo del peor nacionalismo españolista para que el director de Los amantes del Círculo Polar o Lucía y el sexo sea considerado un peligroso terrorista, o lo que es peor, un “equidistante”. Afortunadamente, esta vez no se han salido con la suya. Pelota vasca fue exhibida en el Festival de San Sebastián con gran éxito de crítica y público, y el próximo viernes va ha ser estrenada en todo el estado con más copias de las previstas inicialmente. El que escribe estas líneas tampoco ha visto la película, pero va a ir a verla en cuanto se estrene y se compromete a comentarla y a debatir su contenido con el máximo rigor. Sin duda el linchamiento político y mediático a Julio Medem ha sido uno de los episodios más vergonzosos de la historia de la cultura en el Estado español, y muestra a las claras en qué ciénaga de censura y represión nos está sumergiendo el PP.