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El pasado 16 de julio, Eurolimp-Ferrovial, la contrata encargada de la limpieza del Hospital Ramón y Cajal, despidió a 10 de los 13 miembros del Comité de Empresa. El informe elaborado por uno de los médicos cirujanos tras el retraso sufrido en la limpieza de uno de los quirófanos, manipulado por la empresa con la complicidad de la Gerencia del Hospital, constituye la base sobre la que la contrata de limpiezas despide a sus trabajadoras, acusándolas de impedir la limpieza del mismo.
El intento de la dirección del hospital de trasladar la tarea de la limpieza del mobiliario clínico quirúrgico, desempeñada tradicionalmente por las auxiliares de enfermería, a la plantilla de limpiezas, sumado al incumplimiento sistemático del convenio colectivo y al hostigamiento constante sufrido por el Comité de Empresa por parte de Eurolimp a raíz de la compra de la misma por parte de Ferrovial, tuvo como consecuencia la convocatoria de una huelga que, aunque fue finalmente desconvocada por la intervención de la anterior Gerencia del Hospital, dio origen a la firma de un acuerdo tripartito entre la empresa de limpiezas, las representantes de las trabajadoras y la dirección del hospital.
En dicho acuerdo, suscrito el 21 de abril de 2002, todas las partes se comprometían a llevar a cabo un análisis tras el cual pudiera determinarse el incremento necesario de la plantilla de limpiezas, así como la formación necesaria para que las nuevas funciones pudieran realizarse sin menoscabo de los derechos laborales de las trabajadoras y garantizando la salud de los trabajadores, pacientes y visitantes del hospital.
Sin embargo, Eurolimp-Ferrovial ha aprovechado la llegada de un nuevo equipo de dirección al hospital para volver al ataque e incumplir los términos del acuerdo; así, al no contar con el personal de limpieza suficiente para poder actuar tras una operación y al no dotar al mismo ni de los conocimientos ni de los medios necesarios para realizar esta tarea, los retrasos en la limpieza de los quirófanos vienen siendo habituales.
Ahora intentan enfrentar a las auxiliares de enfermería con las limpiadoras por la limpieza de los quirófanos y el material quirúrgico. El problema es que la empresa Eurolimp-Ferrovial en lugar de contratar nuevas limpiadoras y formarlas para llevar a cabo esas funciones, intenta que sean las limpiadoras actuales las que asuman esa tarea. En los últimos años la sanidad pública está siendo minada de manera sistemática. Además de privatizar sectores y servicios que antes cubría el Insalud, por ejemplo las limpiadoras eran parte de la plantilla del hospital hasta hace unos años, es evidente que el personal sanitario es absolutamente insuficiente. Faltan desde los celadores a médicos y esta deficiencia de personal afecta de manera especial a las enfermeras y auxiliares de enfermería, que cada vez tienen más pacientes a su cargo y mayores responsabilidades mientras ven como se reduce la plantilla.
Como respuesta al despido del Comité de Empresa, el pasado 23 de julio se convocó una huelga indefinida pero, una vez más, la presión a la que las trabajadoras se vieron sometidas por parte de sus encargadas, los servicios mínimos de más del 90% y las continuas provocaciones por parte de la empresa con el objetivo de generar incidentes que originaran más represión y más despidos, impidió a las trabajadoras ejercer su derecho de huelga, por lo que el 25 de julio el comité de empresa inició una huelga de hambre. Sin embargo, la asamblea de trabajadores celebrada el 31 de julio decidió por unanimidad posponer la huelga hasta este mes de septiembre por considerar que la repercusión sería mayor a la vuelta de las vacaciones.
Durante este período, las representantes de las trabajadoras han intentado reunirse tanto con la dirección de la empresa como con la del hospital, para intentar encontrar una salida al conflicto pero hasta el momento no han obtenido ninguna respuesta, por lo que el día 16 de septiembre reiniciarán la huelga para exigir la readmisión de las compañeras del Comité de Empresa, el restablecimiento de todos los derechos sociales y libertades vulnerados y en defensa de la sanidad pública.
