Tras el apuñalamiento de un joven simpatizante de Juventudes Comunistas el pasado 5 de febrero, ahora nos encontramos ante una provocación por parte de grupos fascistas. Estas últimas semanas, un compañero de las Juventudes Comunistas de Guadalajara,Tras el apuñalamiento de un joven simpatizante de Juventudes Comunistas el pasado 5 de febrero, ahora nos encontramos ante una provocación por parte de grupos fascistas. Estas últimas semanas, un compañero de las Juventudes Comunistas de Guadalajara, un militante del Partido Comunista de Guadalajara y dos compañeros de la ejecutiva estatal del Sindicato de Estudiantes, uno de los cuales es el Secretario General, recibieron una citación judicial para un acto de conciliación previo a una demanda por un delito de injurias y calumnias. Este supuesto delito consiste en decir la verdad: que Israel Galve Maldonado apuñaló la noche del 5 de febrero a un simpatizante de las Juventudes Comunistas de Guadalajara y que el mismo Israel Galve había sido puesto en libertad anteriormente tras agredir al compañero de las Juventudes Comunistas ahora denunciado. Esta denuncia la realizó el mismo Israel Galve Maldonado desde su residencia provisional del Centro penitenciario de Alcalá-Meco. Ya fue un atropello que la juez admitiera a trámite este acto de conciliación, en el que se juzga a las víctimas como verdugos. Por todo esto hemos puesto en marcha una campaña de presión para exigir que la la justicia no admita a trámite la demanda contra los cuatro compañeros, y que Israel Galve Maldonado reciba un castigo acorde con su delito que no es otro que el de intento de asesinato.

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