A partir de este mes de enero más de 1.800 guardias civiles y 1.300 policías nacionales serán enviados a los centros educativos de todo el Estado con la excusa de la lucha contra el menudeo de droga en los colegios e institutos. Es evidente que laA partir de este mes de enero más de 1.800 guardias civiles y 1.300 policías nacionales serán enviados a los centros educativos de todo el Estado con la excusa de la lucha contra el menudeo de droga en los colegios e institutos.

Es evidente que la droga es una lacra que los estudiantes y los jóvenes somos los primeros en padecer y que destroza la vida a miles de familias obreras. Pero el gobierno del PSOE, con esta medida, no sólo no va a solucionar un problema que escapa a los centros educativos y que es un problema social, sino que va a criminalizar al conjunto de la juventud y los estudiantes, convirtiendo a las víctimas en verdugos.

Medidas sociales frente a la represión

La lucha contra la droga no pasa por la represión contra la juventud, no pasa por enviar a policías y guardias civiles a los centros de estudio que, además, podrán entrar en ellos para “captar información”. La solución a este problema jamás vendrá de la mano de medidas represivas contra quienes día a día conviven con él o lo sufren directamente. Pasa por solucionar los problemas existentes en muchos barrios obreros, por adoptar medidas sociales, que dignifiquen la vida de la población trabajadora y que den una salida digna a la incertidumbre laboral de millones de jóvenes. Y, por supuesto, también por campañas explicativas y planes de prevención serios en los colegios e institutos que, realmente sirvan para que los jóvenes conozcamos los problemas que suponen las drogas, conociendo los orígenes del mercado de la droga, el suculento negocio de los grandes narcos, su impunidad y su completo blindaje por parte del estado y la justicia burguesa…

Pero para esto hace falta una educación pública de calidad, bien dotada y con medios y profesionales suficientes, algo imposible con leyes educativas como la recién aprobada LOE, que supone un ataque a la educación pública y niega recursos y dinero necesarios a los centros públicos, haciendo imposible poder llevar a cabo cualquier iniciativa de este tipo.

Por el contrario, será la misma policía que mira para otro lado y no hace nada contra quienes sí son un problema para la juventud en muchos barrios obreros, como las bandas fascistas, la encargada de merodear por los institutos. Y ya hemos visto lo que supone la actuación de los cuerpos represivos del Estado en los institutos recientemente, cuando en el IES Ramiro de Maeztu, en Madrid decenas de policías cargaron contra 500 estudiantes hiriendo a uno de gravedad y enviando a varios más al hospital. Es una falacia luchar contra la droga en los institutos simplemente llenando las vallas de los centros de policías. Una vez más, un nuevo lavado de cara a costa de la criminalización y la represión contra la juventud.

banneringles

banneringles

banner

banner

banner

banneringles

banneringles

bannersindicalistas

bannersindicalistas