El Consejo de la Juventud, ese organismo tan democrático que se ha caracterizado en los últimos años por representar fielmente los intereses de los jóvenes siendo la punta de lanza de las movilizaciones contra la derecha (espero que se note que todoe El Consejo de la Juventud, ese organismo tan democrático que se ha caracterizado en los últimos años por representar fielmente los intereses de los jóvenes siendo la punta de lanza de las movilizaciones contra la derecha (espero que se note que todo este párrafo es irónico) ha lanzado una nueva campaña.

Nos tiene acostumbrados a gastar miles de euros públicos en dípticos, carteles con bonitos colores en papel cuché que se distribuyen entre las organizaciones-miembro de dicho consejo (nunca he visto ninguna de esas campañas en los institutos), pero en esa ocasión, a parte del derroche, el Consejo ha cometido un verdadero despropósito: LOS JÓVENES QUE NO VOTEN EN EL REFERÉNDUM DE LA CONSTITUCIÓN EUROPEA SON MONOS. La campaña consiste en distribuir miles de latas de una bebida energética llamada REFERÉNDUM PLUS (¿cuánto habrá costado sacar esa bebida?) que caduca el 20 de febrero y que tiene efectos milagrosos. Como explican en la propaganda que han repartido, sólo tomando una lata de esa bebida dejamos de ser monos y nos convertimos en personas, si un guitarrista rockero, que como ellos dicen “pasa de todo”, se toma la bebida, no sólo abandona la guitarra, sino que además empieza a vestir con camisas de franela y pantalones de pinzas. Además gracias a Referéndum Plus nos dejará de gustar el calimocho... EMPIEZO A DUDAR SI QUIERO PROBAR ESA BEBIDA.

¿Quién es el responsable

de la abstención?

Comparar a los jóvenes que no votan con monos o “animar” la participación con frases que presentan a la juventud como unos “pasotas”, no sólo no sirve para sus supuestos propósitos, sino que es SECTARIO y hace el juego a los propósitos de la derecha de presentar a la juventud como unos borregos y unos vagos. La juventud se ha caracterizado en el último período por ser la punta de lanza de la participación y de la movilización, no dudando en perder sus vacaciones para ayudar a limpiar la catástrofe del Prestige, reivindicar una educación pública de calidad, protestar contra la guerra imperialista de Iraq y contra los atentados terroristas del 11-M. De hecho, tenemos que recordar que si el PSOE está en el gobierno se debe precisamente al aumento de la participación de jóvenes y trabajadores que con su voto lograron echar al PP del poder, lo cual no encaja con la afirmación de “la erosión cada vez más acusada en el número de votantes”.

Por tanto, si en este referéndum muchos jóvenes no acuden a votar tendremos que buscar la explicación, no en la “apatía”, sino en cómo es percibida la Unión Europea por miles de personas y el papel que están jugando las organizaciones de izquierdas con este tema. De hecho son las organizaciones de izquierdas, empezando por el mismo PSOE (que está detrás del Consejo de la Juventud), las principales responsables de la abstención, ya que son las que podrían explicar pacientemente la importancia de participar en el referéndum y, sobre todo, la verdadera naturaleza reaccionaria de la Unión Europea y la Constitución europea.

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