El 27 de febrero la SEPI anunció el primer paso en el Plan de Saneamiento de RTVE que consiste, en primer lugar, en la reconversión de los centros territoriales en simples corresponsalías informativas y, en segundo lugar, en el cierre de Radio 4 queeEl 27 de febrero la SEPI anunció el primer paso en el Plan de Saneamiento de RTVE que consiste, en primer lugar, en la reconversión de los centros territoriales en simples corresponsalías informativas y, en segundo lugar, en el cierre de Radio 4 que emite desde Barcelona en catalán y el cierre del centro de producción de programas de Canarias. Los siguientes pasos de este plan seguramente se pongan encima de la mesa el día 10 de marzo, en la sexta reunión que la SEPI mantendrá con los sindicatos del Ente público.

La entrevista que reproducimos a continuación es un extracto, y se realizó cuatro días antes del anuncio de la SEPI.

El Militante.— ¿Podrías contarnos los motivos de la manifestación de diciembre y vuestra valoración?

Marcel Camacho.— Nos manifestamos con el objetivo de plantear ante la opinión pública una alternativa a la RTVE que existe actualmente. En ese momento estábamos llevando al parlamento propuestas en lo que se refiere a la ley de radio y televisión públicas de titularidad estatal. Queríamos frenar las tendencias de algunos grupos económicos decididos a liquidar o a reducir el servicio público en general.

Partimos de la tesis de que difícilmente el conjunto de la sociedad puede garantizar un servicio democrático, plural e independiente de la información sin que los medios públicos tengan una fuerte implantación.

EM.— ¿Qué puntos tratáis en las enmiendas presentadas al parlamento y como está el debate ahora?

MC.— UGT y CCOO presentamos un conjunto de enmiendas que iban dirigidas básicamente a garantizar un servicio público. La ley avanza algo en cuanto a que la elección del director general y del consejo de administración la hace el parlamento y no el gobierno. Se unifican la figura del presidente del consejo y de director general y se elige desde dentro del consejo. Pero planteamos abrirlo más, y que dicho cargo sea elegido mediante concurso público por el consejo de manera externa.

Además se da más participación a los sindicatos mayoritarios con presencia en RTVE, en este caso CCOO y UGT, pero planteamos algo más vinculado a lo que decía el propio comité de expertos, un consejo de administración con más representación social.

EM.— ¿Qué hay con respecto a la estructura territorial?

MC.— Planteábamos que en la ley debería aparecer como mandato la existencia de una estructura territorial. No lo planteábamos desde una perspectiva meramente laboral, sino que pensábamos que había que tener políticas activas para que los elementos culturales coexistieran. Tanto los de carácter nacionalista, como el vasco o el catalán, como los del estado en su conjunto. Nuestro papel como televisión pública consiste en parte en extraer de los centros territoriales dicha cultura y proyectarla sobre el conjunto del estado. En el gobierno hay otras tesis más bien economistas en las que el papel social se ve de forma residual: demasiado dinero.

EM.— Denunciasteis que este debate se estaba sesgando por el anuncio de la presentación de un plan de viabilidad para RTVE ¿qué ocurre con esto?

MC.— Sucede que la ley pretende establecer el marco jurídico. El plan de saneamiento quiere establecer la dimensión empresarial. Había dos tesis. La del ministerio de economía de Solbes, era que el plan de saneamiento había que hacerlo de una manera inmediata sin definir el modelo lo que significaba. En la práctica que el ministerio de economía fuera el que definiese el modelo, estructura y lo que hay que hacer aquí. Al final el periodo se ha alargado y ahora hablamos de que en el primer semestre estará tanto la ley como el plan de saneamiento.

Lo importante es si al final vas a conservar tu estructura, y la capacidad de producción. Es ahí donde vamos a parar. No es lo mismo tener 8.500 trabajadores que tener 5.000.

EM.— ¿No es paradójico que planteen la necesidad de deshacerse de plantilla mediante prejubilaciones u otras vías y después externalicen gran parte de la producción?

MC.— Calculamos que sólo el 50% es producción interna. El resto es externa o mixta. En muchos casos esto duplica los costes y, fundamentalmente, deteriora el mercado laboral. Aquí trabajamos con un convenio y unas garantías. Si vienes con una productora llegas con un convenio miserable y si el programa dura dos semanas pues es lo que duras.

EM.— ¿Cómo afecta la aparición de todas estas productoras?

MC.— Ahora los medios técnicos y tecnológicos permiten que los costes se reduzcan y cualquiera pueda montar una productora que en vez de una plantilla serán tres o cuatro compañeros de facultad circulando por ahí a ver si les colocan un programa. Esto conduce a la precarización de las condiciones y la desestructuración de las plantillas. Así no se puede hacer una RTV pública, y mucho menos de calidad. La precarización en el empleo conduce a un desastre en la información.

EM.— Otra cuestión importante y desconocida es todo el dinero que se va para pagar los intereses de la deuda ¿Nos podrías explicar esto?

MC.— La deuda no la ha generado el despilfarro sino el que no se le haya dado el dinero que en los presupuestos se decía que RTVE necesitaba. Una táctica inventada por Solchaga. Con el objetivo del déficit cero de Maastrich pensaron: “¿cómo escondemos el déficit? Pues una parte quitándole la subvención a RTV”. Así la obligaron a endeudarse para conseguir fondos, lo que traducido es que el 25-30% del gasto se va en pagar a los bancos, grandes beneficiados de esta historia que logran todos los años alrededor de 50.000 millones, de una deuda avalada por el estado, sin ningún peligro.

EM.— Desde nuestras páginas, cuando hemos intervenido en conflictos de empresas públicas como Astilleros, hemos hecho mucho hincapié en que un gobierno de izquierdas no puede llevar a cabo ninguna política de privatización y sí defender el empleo público ¿vosotros qué pensáis?

MC.- Debido a la propia incidencia del medio, la incidencia política generamos muchas tensiones que les impide finalmente llevar adelante sus proyectos. Consideramos que Solbes no ha podido hacer lo que quería porque nos hemos movido, porque ha habido una respuesta social. Ahora nos queda otro trabajo, el de la propia movilización de los trabajadores para defender lo más inmediato.

EM.— Existe el peligro de que finalmente la reducción de plantilla se haga a través de prejubilaciones como en otras empresas ¿Cuál es vuestra postura?

MC.— Planteamos que en el ERE haya una reposición de empleo. Podemos aceptar que en cualquier empresa sobre o falte gente, pero queremos discutirlo. Usted cuántos dice que sobran y por qué y cuántos faltan y dónde. Efectivamente la tecnología consigue que donde antes hacían falta 4 ahora hace falta uno, pero también abre nuevas áreas de trabajo y nuevos horizontes donde tienes que destinar gente. Lo uno por lo otro.

Desde luego un ERE que no contenga un plan de empresa ni una propuesta de reposición de empleo es una liquidación a largo plazo como han sido las anteriores.

EM.- ¿Qué tipo de continuidad le vais a dar a la movilización de diciembre?

MC.- El gobierno y el parlamento deberían decidir políticamente si quieren que este país tenga una RTV pública y con qué objetivos, eso es lo primero. Creemos que intentarán reducir por los centros territoriales fundamentalmente, y luego abandonarán determinados aspectos de la producción. Vamos a informar a los trabajadores y a propiciar acciones unitarias dentro de la empresa con el objetivo de impedir la reducción de la estructura territorial.

banneringles

banneringles

banner

banner

banner

banneringles

banneringles

bannersindicalistas

bannersindicalistas