¡Un saludo, compañeros!
La empresa de transportes DAMAS SA ha llevado a cabo recientemente el despido de siete trabajadores. Estos trabajadores componían en su totalidad el comité de huelga que convocó el paro legal el pasado 23 de mayo, paro que fue motivado por el incumplimiento reiterado de la empresa del Convenio Colectivo y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. El pasado 1 de julio, el grupo de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Villaverde del Río presentó una moción de apoyo a los trabajadores despedidos y a las reivindicaciones de la plantilla, moción que fue aprobada por unanimidad de los presentes.
Conversamos con Miguel Caballero León, vecino de nuestra localidad, que es uno de los trabajadores represaliados. Miguel es delegado de Personal de DAMAS SA en Sevilla y pertenece al sindicato CGT.
La Voz del Pueblo.— Explícanos un poco cómo se produce el conflicto y cuáles son vuestras peticiones.
Miguel Caballero.— El conflicto empieza cuando la empresa incumple reiteradamente el convenio colectivo y el decreto 1.561 que es el que regula los tiempos de descanso de los conductores en carretera. Estamos trabajando 14, 15 ó 16 horas diarias y cuando llega el descanso semanal, la empresa no nos concede tal descanso. Lo que queremos es disfrutar del descanso que es absolutamente necesario para garantizar la seguridad de los pasajeros y los conductores. No queremos que se nos pague el descanso porque cuando llevamos más de 14 horas trabajando diariamente y cuando llega un descanso semanal no se lo vendemos a nadie, queremos disfrutarlo con nuestras familias. Empezamos a tener varias reuniones con la empresa pero ésta prometía mucho y cumplía poco. Se hicieron varias asambleas y por unanimidad de los trabajadores decidimos hacer tres días de huelga en abril para que la empresa se diera cuenta de que lo único que pedíamos era lo que estaba en convenio, que no pedíamos ningún aumento salarial, simplemente lo firmado en convenio colectivo en materia de seguridad tanto para usuarios como para conductores y terceros.
LVP.— ¿Y qué actitud ha tenido la empresa ante vuestras reivindicaciones?
MC.— Esta empresa responde expedientando a siete trabajadores por “acción activa y agresiva” durante la huelga, algo que me parece desproporcionado. La huelga fue pacífica e informativa a los usuarios. Se les entregó un escrito solicitando que la empresa se atenga al convenio colectivo vigente y la empresa reacciona quitándole el descanso a todos los conductores que lo habían pedido por escrito.
LVP.— Desde ese momento habéis continuado vuestra lucha para recuperar vuestros derechos. ¿Qué medidas de presión estáis realizando y qué ambiente se respira en la plantilla?
MC.— Bueno, el ambiente entre los trabajadores es muy bueno. Como delegado sindical me he sentido apoyado en todo momento y de la misma manera todos los compañeros despedidos del comité de huelga. Esto es producto de nuestra forma de actuar y de entender el sindicalismo, con asambleas democráticas de los trabajadores donde se decide todo, nada de chanchullos y acuerdos con la empresa bajo cuerda.
Respecto a las medidas de presión, elaboramos un calendario de huelga para varias jornadas de agosto y septiembre. Tenemos pensado declarar huelga general indefinida en toda Andalucía; tenemos contactos con compañeros en Huelva, Málaga y Cádiz, donde tienen las mismas condiciones de trabajo que nosotros, con jornadas de más de 13 horas. Hemos tenido tres convocatorias de huelga y en las tres se han fijado unos servicios mínimos que hemos respetado a pesar de que en la última jornada la empresa ha impuesto unos servicios mínimos abusivos que incomprensiblemente han sido admitidos por la Consejería de Empleo. La empresa continúa con su actitud provocadora. Acabamos de denunciar lo que es la sustitución de trabajadores en huelga que está haciendo la empresa y que atenta contra el derecho de una huelga totalmente legalizada por la Consejería de Trabajo. La empresa no quiere enterarse que su plantilla está en huelga y sólo puede dar los servicios mínimos, y por supuesto, no puede contratar a nadie para que sustituya a los trabajadores en huelga. Precisamente, nosotros estamos defendiendo que se contrate a nuevos trabajadores, es decir, aumentar la plantilla, para atender los nuevos servicios y garantizar un descanso semanal a toda la plantilla, pero la empresa se niega. Y ahora que nos declaramos en huelga los contrata para sustituirnos llamando a otra empresa para que saque los servicios, algo que hemos denunciado al juzgado de lo social y ante la Consejería de la Junta de Andalucía.
LVP.— Se han presentado mociones de apoyo a vuestra causa en muchos Ayuntamientos, en Diputación, ¿cómo valoráis este apoyo?
MC.— Lo valoramos positivamente y agradecemos a los políticos, a los ayuntamientos y a la Junta el que se hayan interesado por nuestros problemas. Pero, en particular, respecto a la Junta de Andalucía pensamos que podían hacer algo más por solucionar el conflicto. Hemos presentado en las Consejerías de Empleo y de Transportes un dossier con pruebas documentales de lo que está haciendo la empresa, que no respeta los descansos, que se salta lo dispuesto en el convenio y en la ley en materia de seguridad, ¿por qué no presiona la Junta para que la empresa se atenga a la ley y readmita sin represalias a los trabajadores despedidos? No lo sabemos. Parece que alguien los protege, que tienen un trato preferente.
LVP.— De hecho, es la Consejería de Transportes la que otorga las licencias para que DAMAS SA como empresa de transportes pueda ejercer su actividad, está claro que la Junta, viendo la justicia de las peticiones de los trabajadores, podía condicionar la concesión de la licencia a que esta empresa respetara el Convenio Colectivo y abandonara la actitud de persecución y despidos. Por último, habéis establecido una acampada de protesta frente a la estación de autobuses en Sevilla, ¿habéis notado el calor y el apoyo de la ciudadanía y otros trabajadores?
MC.— Totalmente. Los usuarios, especialmente del Aljarafe, comprenden nuestra situación y el beneficio para su seguridad que representan nuestras peticiones. Hemos recogido casi 9.000 firmas de apoyo. También nos llegan aportaciones económicas a la cuenta de resistencia que hemos abierto. Es muy importante la solidaridad de los ciudadanos y de los trabajadores.
¡Por la readmisión de los trabajadores despedidos!
¡Apoya las justas reivindicaciones de los trabajadores de DAMAS SA!
La cuenta de solidaridad está abierta en La Caixa y el número es: 2100 - 2549 - 81 - 0110126572
