El maquinista del Talgo, José Manuel Egea Godínez, era el secretario del sindicato SEMAF de Murcia. Por supuesto lo conocía y puedo asegurar que era una excelente persona, además de ser un profesional tremendamente responsable donde los hubiera. Todos estamos muy tristes por esta masacre humana, además de por nuestros compañeros.

El mismo día de la tragedia vergonzosa, como anécdota repugnante que no me resisto a comentar porque viene muy a cuento, el diario La Opinión de Murcia despachaba otro gran titular, dándonos la noticia de que vamos a tener un Futuro de ficción: “Una casa inteligente y un coche con Internet, protagonistas de la feria SICARM 2003 que se celebra en el paseo Alfonso X El Sabio, en Murcia, hasta el lunes”. Desde esa casa y ese coche se pueden hacer virguerías.

Mientras, en otras páginas del mismo diario nos servían la noticia de la masacre en la “tragedia ferroviaria” provocada por tener un ferrocarril tercermundista, donde se juega con la vida diaria de 600.000 viajeros que utilizan al año este tren. Una cifra bastante elevada y para tenerle mucho respeto.

Pues si, amigos, es muy difícil casar ambas noticias, lo de la casa y coche de ficción de la feria SICARM y la masacre provocada por el choque frontal entre el mercancías y el Talgo, sin ningún tipo de comunicación entre los maquinistas y estaciones y/o puestos de mando, con bloqueo telefónico, es decir, tecnología de humo. ¿Qué hacen con el dinero que recaudan de los contribuyentes y el de los billetes, que encima son muy caros?

Estas dos noticias son la viva expresión del sarcástico e infame desarrollo capitalista que con tanta propaganda embauca a los pobres de espíritu. Todos los avances de la técnica, de la medicina para unos cuantos privilegiados y sus adláteres, dueños del mundo, mientras la gente muere de hambre y miseria sin tener acceso a los avances de la ciencia que tiene que extenderse para mejorar la vida de todo ser humano y no para beneficio de unos cuántos.

Retomando el tema que nos ocupa, la causa de esta trágica masacre, tragedia ya anunciada, no es otra que el abandono al que está sometida esta línea de Chinchilla a Murcia-Cartagena, tanto en el ámbito de inversiones en infraestructuras y automatización de los sistemas de circulación y comunicación como la grave escasez en recursos humanos. Hay que saber que esta línea todavía tiene bloqueo telefónico de trenes. ¿Que quiere decir esto? Pues que un jefe de circulación, le pide vía al otro colateral para mandarle un tren en el caso de que esté el trayecto libre; el otro jefe de circulación se la concede y entonces el trayecto está bloqueado porque habrá un tren circulando. Evidentemente, ningún otro tren podrá circular en el mismo sentido y mucho menos en el contrario. Ese sistema, incluso sin ser ningún experto y a simple vista, es muy obsoleto; es como el método Ogino para la prevención de embarazos. En los tiempos de los trenes de vapor era consustancial al sistema ferroviario, pero ahora es de risa en estos tiempos de alta tecnología.

Evidentemente ese sistema deja bastante margen al fallo humano, máxime si se trabaja, con escasez de personal**. En esta vía todo el peso de la circulación recae en el factor humano y encima es cada vez más escaso. Eso sin contar que los trenes cada vez corren más, pues por estas vías pueden alcanzar hasta los 200 km/h.

Otra grave circunstancia es que han eliminado los ayudantes ferroviarios. Estos trabajadores hacían una función muy positiva en las estaciones, pues, como su propio nombre indica, ayudaban en su cometido a los jefes de circulación haciendo un trabajo digamos más manual y mecánico, pero de extraordinaria importancia ya que permitían que el jefe de circulación estuviera más centrado en su función de responsabilidad, además de que el que sean dos personas las que estén al tanto de las operaciones a realizar es un elemento a tener en cuenta para corregir el posible fallo de alguno de ellos.

Por ello, remachar que las causas remotas y próximas del accidente de Chinchilla obedecen a una línea de ferrocarril con una infraestructura totalmente tercermundista, en la que no existen las comunicaciones de los trenes con las estaciones, con el puesto de mando, con otros trenes etc. para comunicar cualquier emergencia, cualquier incidencia del servicio o urgencia. Si hubieran llevado los trenes un sistema de comunicación eficiente, aún con el fallo humano se habría podido corregir inmediatamente. Todos esos factores son los responsables de esa tragedia de accidente ferroviario.

Situación tercermundista

Ahora en estos días, las televisiones, radio, periódicos, los medios propagandísticos gubernamentales nos bombardean con no sé cuantas actuaciones ferroviarias aquí en Murcia. Con todas estas promesas, esto parecerá el país de las maravillas ferroviarias.

Pero todo al poco tiempo se borra y otra vez la cruda, triste e incontrovertible realidad volverá, como las oscuras golondrinas y España seguirá siendo el segundo país más grande en extensión de Europa en km2 y con sólo 14.000 kilómetros de vías, mientras que Alemania tiene 37.500 kilómetros, Francia 31.500, Gran Bretaña 17.500 e Italia 16.100. En cuanto a las vías únicas en las que circulan trenes en dos direcciones, España tiene el 65%, Gran Bretaña el 27%, Francia el 50%, Alemania el 52% e Italia el 60%. La electrificación de las vías también está por debajo de toda Europa. Y un dato muy importante, los trabajadores ferroviarios son en España 32.500, en Alemania son 195.000, en Francia 174.500, en Italia 114.200 y en Gran Bretaña 106.800. Así que en España hay 2,45 empleados por kilómetro de vía, mientras que en Italia son 7,09, en Gran Bretaña 6,13, en Francia 5,55 y en Alemania 5,20 empleados. Si nos vamos a otros países, Rusia tiene 10 trabajadores por kilómetro de vía, Tailandia tiene 7, Brasil 3,5, Tanzania 7... Eso quiere decir que Renfe tiene menos trabajadores que países tercermundistas.

Otro dato de interés es que los viajeros en España son 500 millones, en Francia 850, en Alemania 1.700 millones, en Gran Bretaña 900 millones y en Italia 430 millones. Creo que es muy interesante saber que en 1980 Renfe tenía 76.000 trabajadores y transportaba 167 millones de viajeros, es decir que tocaba cada empleado a 2.500 viajeros, ahora la compañía ferroviaria tiene 32.500 empleados y transporta 500 millones de viajeros, tocando cada empleado a 15.500 viajeros. Así que España es uno de los países del mundo que menos trabajadores tiene en el ferrocarril. Lo que es más preocupante y tremendo es que al mismo tiempo que los viajeros han aumentado de forma vertiginosa, los empleados ferroviarios han bajado.

Y por último, ya que estamos con datos y para rematar la faena, es de interés conocer que en la Gerencia de Valencia, que es donde pertenece Murcia, en cuanto al personal de circulación, tenemos en torno a los 400empleados que trabajen, mientras que el personal de Jefatura de Dirección, de apoyo y mandos intermedios son unos 150. Y más o menos podríamos decir de todos los servicios, que encima es una empresa macro encefálica. Nada más hay cabeza, es decir, mandos y muy pocos obreros.

* El Sindicato Ferroviario surge de la sección de CCOO en Renfe.

** Sin embargo los bloqueos automáticos no dependen de las personas, sino de la técnica ya que se regula por señales luminosas eléctricas y circuitos eléctricos de vía, donde los mismos trenes van bloqueando los tramos que ocupan, en los cuales ningún otro tren puede estar circulando en ningún sentido con total y absoluta seguridad. Todos los trenes de hoy, llevan incorporados dispositivos técnicos de frenos automáticos, ASFA, etc., que impiden al maquinista circular cuando un trayecto está ocupado, porque las señales se lo impiden. Asimismo, el bloqueo automático le impide al jefe de circulación, aunque quisiera, hacer circular un tren cuando un trayecto de vía está bloqueado, es decir, está ocupado por otro tren.