La actitud prepotente de la patronal es algo que no nos debería sorprender a todos los que llevamos trabajando unos cuantos años en este sector. Pero la propuesta que han presentado esta vez ante la mesa negociadora ha sido especialmente ofensiva para todos nosotros. Su pretensión de aumentar la jornada laboral, el recorte de las prestaciones en caso de incapacidad temporal, una subida salarial muy inferior al IPC y sobre todo el intento de eliminar la antigüedad. Todos estos puntos en conjunto y algunos más conforman una propuesta insultante e inaceptable para todos los trabajadores de seguridad.

El día 19 de octubre se celebró en Valencia una asamblea conjunta de UGT, CCOO y USO en la que quedó patente que los trabajadores no estamos satisfechos con la manera en cómo se está llevando la negociación por parte de la mesa negociadora. El ambiente mayoritario entre los vigilantes es de que las medidas que se van a adoptar no son suficientes. De momento las medidas que se han planteado desde la mesa son dos:

· Una concentración el día 27 por la mañana.

· La negativa de hacer horas extras en noviembre.

Para el que no lo sepa es necesario recordar que la medida de no hacer horas extras ya se puso en práctica en la negociación del último convenio y fue un absoluto fracaso. Si se quiere entablar una batalla seria por un convenio digno hay que considerar medidas de presión que sean más eficaces. No hay que olvidar que muchos vigilantes viven de las horas extras, y para ellos supondría un gran contratiempo el no ingresar durante un mes o más ese dinero extra. Los dirigentes sindicales se escudan diciendo que si un trabajador no está dispuesto a dejar de hacer horas extras menos lo estará en secundar una jornada de huelga. Pero esto es falso porque en la mayoría de los casos el vigilante perdería más dinero con la primera medida que con la segunda. Y además, la negativa de hacer horas extras es mucho más proclive a las presiones por parte de la empresa

El día 21 la patronal presentó una nueva propuesta en la que se suavizaban los términos de ésta. No obstante, la subida salarial sigue siendo inferior al IPC, con lo que la movilización sigue en marcha.

Los trabajadores de seguridad no debemos descartar la posibilidad de la convocatoria de una jornada de huelga, teniendo siempre en cuenta las limitaciones con las que nos enfrentamos en el sector (tenemos impuestos unos servicios mínimos por servicio no inferiores a un 70%). Pero si los sindicatos iniciasen una campaña seria de información y de concienciación del conjunto de los vigilantes sobre la necesidad de llevar a cabo acciones contundentes seguro que todo el descontento que existe en estos momentos en el sector se transformaría en ilusión por cambiar las cosas.

Esta sería la única manera de llegar a un resultado satisfactorio en la negociación de este convenio. Es necesario reivindicar la inclusión de los auxiliares en el convenio de los vigilantes, ya que esto nos daría más fuerza a la hora de la lucha. Y no hay que olvidar que una victoria importante en el terreno sindical supondría un punto de inflexión decisivo en nuestro sector, que aunque en estos momentos es uno de los más atrasados dentro del movimiento obrero, es posible que algún día consigamos cambiar esta realidad.

¡POR UN CONVENIO DIGNO

EN SEGURIDAD PRIVADA!

Fernando Hidalgo

Vigilante · Afiliado UGT-Valencia

ULTIMA HORA

En la concentración de trabajadores de la seguridad el día 27 de octubre en Valencia, convocada conjuntamente por UGT, CCOO y USO, con una asistencia de 300 vigilantes, muy animados (a pesar de que mucha gente no pudo asistir porque trabajaba) quedó patente la voluntad de luchar y el sentimiento de unidad que existe en el sector.