Las huelgas del 8 y 21 de mayo serán un gran avance. La organización está creciendo y se han sumado los estudiantes
En febrero miles de profesoras y profesores de primaria y secundaria, convocados por la Asamblea Menos Lectivas y los sindicatos CNT, CGT y STEM, protagonizaron una exitosa huelga de 72 horas en la educación pública madrileña. Exigían la reversión de los duros recortes impuestos desde 2011 por el PP y que implicaron el despido de miles de docentes, la reducción de las horas lectivas a 23 en primaria y 18 en secundaria, y de las ratios para atender adecuadamente a los alumnos, incluidas las aulas TEA.
Esta huelga ha supuesto además un auténtico desafío a una burocracia sindical de CCOO y UGT que, incluso, llegó a boicotearla y que durante años se ha negado a organizar seriamente la lucha contra los ataques del Gobierno de Ayuso, mientras la educación pública se degrada cada vez más.
Ahora hay una nueva convocatoria para los días 8 y 21 de mayo. Hablamos de ello con Laura Calderón, profesora de secundaria, y a Sandra Blázquez, de primaria, ambas militantes de Izquierda Revolucionaria y afiliadas a CNT.
El Militante.- ¿Qué balance hacéis de la huelga y del surgimiento de la Asamblea Menos Lectivas?
Laura Calderón.- Lo que demostró, con mucha fuerza, era que años de desmovilización entre el profesorado no se correspondían en absoluto con el estado de ánimo y disposición a la lucha de la comunidad educativa. En todo este tiempo, mientras veíamos que nuestros centros de estudio públicos colapsaban por la política de recortes y clasista del PP, desde las direcciones de CCOO y UGT se nos insistía en que no se podía hacer otra cosa.
Este nuevo movimiento, que ha nacido de la iniciativa de profesores desde los propios centros de trabajo para retomar la lucha en la calle, ha puesto en evidencia que era esta política sindical completamente derrotista, que reniega de la lucha y se encuentra cómoda gestionando los recortes, la que generaba un falso ambiente de paz social y asfaltaba el camino al PP para poder llevar adelante sus planes sin oposición.
Sandra Blázquez.- Un aspecto central ha sido cómo se ha planteado esta huelga y el carácter que ha tenido desde el principio. Han sido muchos años en los que cuando nos han llamado a secundar huelgas los sindicatos de la mesa sectorial, en la práctica, los trabajadores no teníamos ningún control sobre qué pasos dar, cómo organizar nuestras fuerzas y cómo poder torcerle el brazo al PP.
Esta forma de plantear las huelgas burocráticamente, sin darnos participación, fue sembrando escepticismo entre muchos compañeros. Pero esta huelga se ha organizado desde los propios centros, retomando las mejores tradiciones del movimiento obrero con asambleas, piquetes y acción directa. Y muchos compañeros, incluso muchos afiliados de CCOO, han participado y comprobado que esto sí era una lucha que iba en serio para tumbar la política reaccionaria de Ayuso.
EM.- ¿Cómo estáis organizando las huelgas del 8 y 21 de mayo? ¿Qué repercusión pensáis que tendrán?
SB.- Va a ser un paso adelante muy importante. Tras las acciones y movilizaciones de febrero, nuevos compañeros se sienten con fuerza y confianza para participar y organizar estas huelgas. La organización a nivel de asamblea de centros está creciendo, además se están sumando nuevos sectores más allá del profesorado.
El Sindicato de Estudiantes va a convocar a los estudiantes a la huelga, y a coordinarse conjuntamente a nivel de centro con el resto de la comunidad educativa. Además, y es una idea que desde la CNT estamos haciendo hincapié, tenemos que organizar a las trabajadoras y trabajadores de la enseñanza más allá del profesorado y que han sido especialmente abandonados por los sindicatos de la mesa sectorial. Nuestras compañeras y compañeros de limpieza, PTIS, clases de refuerzo, comedor... son tan trabajadores de la enseñanza pública como nosotros, pero están sufriendo una subcontratación y precariedad terrible.
LC.- Sí, y demuestra que este movimiento no es flor de un día. En esta línea de ir ampliando la lucha, otro aspecto importante es que hemos obligado a las direcciones de CCOO y UGT a que convoquen esta huelga. Pero desde la CNT y Menos Lectivas tenemos claro, y así lo hemos decidido en asamblea, que no vamos a delegar en nadie que no sean nuestras propias fuerzas el desarrollo de esta lucha. Sumar para golpear al PP sí, pero somos conscientes que no queremos volver a escenarios anteriores en los que trabajadores y trabajadoras perdamos la capacidad sobre cómo llevar nuestra lucha adelante. Por eso también estamos batallando por salir de este movimiento más organizados, levantando una alternativa sindical combativa y asamblearia.
EM.- ¿Qué perspectiva de continuidad hay?
LC.- La importancia de terminar el calendario escolar golpeando con estas huelgas es que nos permite preparar nuestras fuerzas, con la organización a nivel de centros fortalecida, para volver a las asambleas en septiembre y comenzar el curso parando las clases.
SB.- Estamos proponiendo realizar un congreso de Menos Lectivas en julio para sacar todas las conclusiones de este curso e impulsar la construcción de esa alternativa del sindicalismo combativo y de clase que necesitamos. También en las comisiones de la asamblea se está preparando contactar con otros trabajadores de los servicios públicos de Madrid en lucha, empezando por la sanidad, con el fin de proponer para el otoño una huelga general de los servicios públicos en la comunidad de Madrid.