El jueves 14 de abril, unas 20 personas nos reunimos en el nuevo Casal Marxista de Tarragona con el objetivo de explicar y valorar la lucha de los trabajadores de Emte. Fue un acto que salió redondo, ya que no sólo discutimos una lucha que terminó en una gran victoria, sino que también inaugurábamos nuestro nuevo local y además conmemoramos el aniversario de la proclamación de la Segunda República que dió inicio a un amplio y profundo proceso revolucionario en el Estado español.

Los ponentes explicaron que no se trataba de un acto que marcaba el punto final de una lucha, que más bien se trataba de "el fin" de un capítulo, ya que para los trabajadores de Emte, como para el resto de la clase trabajadora, la lucha continúa mientras continúe la explotación del sistema capitalista.

Manu Vidal explicó a grandes rasgos lo que había sido la lucha, los brutales ataques y las numerosas artimañas utilizadas por la empresa y como cada uno de estos habían sido remitidos gracias a la lucha, desde la primera sanción hasta la última, pasando, claro está, por dos despidos. Los compañeros tuvieron claro desde el principio que la clave estaba en extender la lucha, en hacer público el conflicto, en llevarlo a la petroquímica de Tarragona para conseguir la solidaridad de la clase trabajadora y evitar el aislamiento del conflicto.

A continuación varios compañeros explicaron el contexto social de crisis del capitalismo en la que se producen estos ataques, poniendo ejemplos de otros conflictos y explicando el origen de la crisis del capitalismo. En resumen, no se trata de que los empresarios se hayan vuelto "más malos" sino que en el contexto actual de crisis capitalista, estos intentan mantener a toda costa su tasa de beneficios y su principal fuente para conseguir esto se basa en exprimir más y más la plusvalía que sacan de la clase trabajadora, haciéndonos trabajar más tiempo y más duro y recortando nuestros derechos hasta los huesos. Para este plan el incremento de la represión sindical es un elemento clave.

Tras las exposiciones  tuvimos un turno de palabras muy animado, con intervenciones muy inspiradoras. Varios asistentes remarcaron la idea de que cuando la patronal gana una lucha, se envalentona, pero cuando es la clase obrera la que gana se dan circunstancias muy favorables para fortalecernos y organizarnos más. Otros transmitieron su experiencia de las luchas de los parados de Tarragona en las que habían participado e incluso dirigido en los años 80. Explicaron cómo se organizaron y lo que consiguieron y la importancia de recuperar las mejores tradiciones de la clase trabajadora. Otros compañeros hablaron sobre los ataques a la sanidad pública y sobre la revolución en el mundo árabe. Para finalizar el acto realizamos una pequeña colecta donde se sacaron 40 euros y los compañeros de la mesa pasaron a la concluir el acto. Como decíamos, el acto fue de optimismo y de ánimos para seguir adelante. El eslogan de "luchar sirve" quedó grabado, por la fuerza de las experiencias que se debatieron, en la cabeza de los asistentes. ¡Este acto fue la mejor forma de inaugurar el nuevo local de El Militante en Tarragona!