A lo largo de ocho días, afiliados al Sindicato de Estudiantes y miembros de la Corriente Marxista El Militante procedentes de diversas zonas del estado hemos trabajado duro y de manera completamente desinteresada con el fin de conseguir los recursos económicos necesarios para afrontar el nuevo curso, convirtiendo las casetas en una palanca para la extensión de la lucha y la organización del movimiento y desarrollando también una intensa actividad política en las mismas.
Los asistentes a las casetas pudieron obtener información sobre la lucha contra la ley Wert y participar en la campaña de solidaridad contra dos sindicalistas despedidos: Juan Carrasco, en Serunión Málaga, e Ivonne García Cabello, en Europastry Barcelona, ambos casos claros ejemplos de represión sindical.
Por otro lado, durante toda la semana de fiestas repartimos, junto a militantes de otras casetas de la izquierda, una hoja denunciando la privatización de la Feria que está llevando a cabo el ayuntamiento del PP en Málaga.