27 de enero: ¡Todos a la huelga general en Euskal Herria!

Por la unidad de acción sindical. UGT y CCOO deben romper las negociaciones con el gobierno y extender la huelga a todo el Estado

Los hechos de las últimas semanas han dejado claro que el Gobierno de Zapatero ha cedido a la presión del gran capital "pese a quien pese" y aun a costa de inmolarse. En las reuniones de Zapatero con los máximos representantes de la Banca y las grandes empresas se ha comprometido, bajo su supervisión, a aplicar tajantemente un plan exhaustivo de recortes sociales para ganar la confianza de "los mercados". El PNV ha llegado a un acuerdo global con Zapatero para que en lo que queda de legislatura pueda aplicar esta batería de recortes, y el PP solo espera que el Gobierno haga el trabajo sucio y caiga como una fruta madura, para que la derecha pueda continuar con la demolición del estado del bienestar y de las conquistas históricas de la clase trabajadora.

Recortes generalizados de las conquistas sociales

El Gobierno, después de aprobar la contrarreforma laboral más lesiva contra los trabajadores de las últimas décadas, ha continuado adoptando medidas a favor de las granes empresas y la banca: ha privatizado AENA y la gestión de los aeropuertos de además de las apuestas del Estado. Su calendario de privatizaciones se extiende también a la sanidad y la educación... Han aprobado unos Presupuestos Generales del Estado que congelan las pensiones y el gasto social, y reduce considerablemente los salarios de los funcionarios. Han aumentado los impuestos indirectos que más cargan a la clase trabajadora, como el IVA que sube al 18%. Y todo esto mientras el desempleo afecta ya a 4,6 millones de trabajadores, y la inflación se sitúa casi al 3% mermando el poder adquisitivo de la mayoría de la población.

La situación es cada día más insoportable para centenares de miles de familias obreras. La morosidad, los desahucios y las colas en los comedores asistenciales crecen sin parar. La crisis que los capitalistas han generado la estamos pagando los más débiles, los de siempre, mientras los beneficios de la patronal, en plena crisis, crecen de forma espectacular gracias a estas medidas. Los beneficios de las grandes empresas en 2010 han sido récord. En el 2010 el sueldo medio de cada uno de los miembros de los consejos del Ibex fue de 699.000 euros anuales. El de los altos ejecutivos de 2,7 millones de euros. A ellos, que no pagan apenas impuestos, se les recorta el impuesto de sociedades y el de transmisiones patrimoniales y se les facilita las SICAV y otros mecanismos para que sigan evadiendo capitales.

Aumento de la edad de jubilación a los 67 años

El Gobierno, siguiendo los dictados del FMI y los grandes capitalistas, está decidido a aumentar la edad de jubilación hasta los 67 años y recortar las pensiones entre un 20 y un 25% al incrementar el período de cómputo con el objeto de potenciar su privatización. Un ataque sin precedentes que se completa con la intención de acabar con la negociación colectiva en beneficio de los empresarios. La patronal demanda que se acabe con la ultraactividad de los convenios que mantienen su vigencia hasta la firma de un nuevo convenio. En una época donde la patronal se niega a firmar convenios que no contengan recortes y aumentos de jornada y flexibilidad, quieren utilizar las cláusulas de descuelgue para quitar efectividad a la negociación colectiva. Su objetivo: potenciar a corto plazo los convenios de empresa frente a los de ámbito superior, y a más largo plazo eliminar la negociación colectiva mediante contratos individuales aprovechándose de un desempleo del 20% -que reconocen que será crónico- para eliminar derechos fundamentales de los trabajadores.

Pero estos no son las únicas agresiones que están encima de la mesa. En diciembre aprobaron por decreto potenciar las ETTs reconvertidas en "agencias privadas de colocación", se eliminaron las ayudas por hijo de 2.500 euros... En febrero se eliminan las ayudas de 426 euros que afecta a más de medio millón de parados. Después de que la anterior reforma laboral se haya demostrado un rotundo fracaso quieren otra reforma que generalice aún más el despido barato.

No al pacto social

El Gobierno ha llevado a las direcciones de CCOO y UGT a las mesas de negociación para implicarles en su política de recortes. A pesar de que en diciembre CCOO y UGT anunciasen que se convocaría una huelga general si se aplicaba la jubilación a los 67 años, ahora han retrocedido y han propuesto un pacto donde entre también la patronal, que lógicamente ha aceptado gustosa. Cándido Méndez y Toxo están cometiendo un gravísimo error negándose a dar continuidad a la movilización, y lejos de resolver nada con su actitud aumentarán los apetitos y la audacia de la patronal. Aquí no hay ninguna negociación. Se trata de la dictadura del gran capital. Es un trágala puro y duro como demuestra que hayan puesto fechas a la aplicación de sus contrarreformas y que Zapatero haya ratificado ante los grandes empresarios que habrá reformas sí o sí por decreto. La política que están llevando las direcciones de UGT y CCOO es un suicidio y deben rectificar inmediatamente. Es necesario frenar estos ataques contra los derechos fundamentales de los trabajadores y sus familias a través de la movilización más masiva y contundente, o de lo contrario habrá muchos más recortes los próximos meses. Zapatero habla de cinco años de "reformas" de este tipo que lejos de representar una salida a la crisis económica, destrozarán aún más el poder adquisitivo, aumentando el paro y la miseria de la clase obrera.

27 de enero ¡Todos a la huelga general en Euskal Herria!

En esta situación la mayoría sindical vasca, ELA, LAB, ESK, HIRU, CGT y la CIG en Galicia han convocado huelga general para el próximo 27 de enero. La convocatoria de huelga general por parte de la mayoría sindical vasca en esta situación es un paso adelante, y debe servir para trabajar de forma decidida a favor de la unidad de acción de todas las organizaciones sindicales y obligar a CCOO y UGT a rectificar su estrategia. Por eso no puede volver a ocurrir lo que pasó tras la exitosa huelga general del 29 de Junio, que se llame a luchar empresa por empresa en la negociación colectiva y no se apoyase la huelga del 29 de septiembre convocada en todo el Estado. LAB apoyó las huelgas generales en Francia y en Portugal ¿Por qué no la del 29S que nos afectaba directamente a todos los trabajadores vascos? Los intereses generales del movimiento obrero deben colocarse por encima de cualquier otra consideración y eso exige la máxima unidad de acción. Obviamente, trabajar por la unidad de acción en unos momentos en que las direcciones de CCOO y UGT están de nuevo empantanadas en negociaciones con el gobierno, que son un completo error, exige de la mayoría sindical vasca un llamamiento compañero y fraternal a la base de esas organizaciones, para que en las empresas apoyen la huelga del 27 de enero y presionen a sus dirigentes para que rompan con la política de pacto social y se sumen a la lucha, extendiendo la convocatoria a todo el Estado.

Extender la lucha, defender una alternativa socialista

Los trabajadores hoy somos más y más fuertes, pero sin organización somos carne de explotación. Hace falta estar organizados y tener un programa alternativo al capitalismo. El papel de las organizaciones políticas y sindicales de la clase trabajadora es más vital en los momentos de crisis del capitalismo, por eso la burguesía ataca a los sindicatos con saña si presentan batalla. Solo quieren a las organizaciones obreras si les sirven para frenar el movimiento y desmovilizar a la clase obrera. Por eso necesitamos recuperar dichas organizaciones como instrumentos de lucha para acabar con este sistema injusto y avanzar hacia el socialismo. La lucha de los trabajadores griegos, franceses, portugueses, irlandeses...es nuestra misma lucha; por ello la huelga del 27 de enero debe servir para levantar al movimiento obrero y extender la movilización hasta derrotar los planes de ajuste de los gobiernos procapitalistas, con una nueva una huelga general de 48 horas en el conjunto del Estado español y la convocatoria de una huelga general en toda Europa con un programa auténticamente socialista para transformar la sociedad.

Jubilación a los 60 años con el 100% del salario con contratos de relevo, manteniendo la estabilidad en el empleo

Reducción de la jornada laboral a 35 horas sin reducción salarial. Contra el desempleo: reparto del trabajo

Salario Mínimo de 1.100 euros al mes a partir de los 16 años.

No a la reforma laboral.

Defensa de la empresa pública. No a las privatizaciones. Defensa de la Sanidad y la educación públicas. 7% del PIB para educación.

Un puesto de trabajo o subsidio de desempleo indefinido igual al SMI hasta encontrar trabajo.

Derogación de la Ley de Extranjería. Plenos derechos laborales y ciudadanos para los inmigrantes.

Ninguna restricción en nuestros derechos de expresión, reunión y huelga. No a la Ley de Partidos.

Nacionalización de la banca y los monopolios sin indemnización bajo control obrero. De esta forma se podría planificar democráticamente la economía en beneficio de la mayoría de la sociedad.